En homenaje al periodista Leslie Solomon, editor del Popular Electronics, a quienes los jóvenes le decían The Uncle Sun, y que fue el alma mater de la Altair 8800, la primera computadora personal, aparecida en enero de 1975. Se acaban de cumplir 30 años. Todos sus colegas lo han olvidado. El Tío Les no puso nunca avisos ni figuró en la revista Forbes. Se conformó con revolucionar la modernidad. Ahora, el acceso a todas las noticias a 35 años del inicio.
5.12.10
¡EL IMPERIALISMO ATACA!
25.11.10
¡CON LOS ASCENSORES, NO!
24.11.10
17.11.10
DESPUES DICEN QUE NO HAY INFLACION
9.11.10
¡CE HACHE I! ¡CHI! ¡ELE E!
Fue en la quebrada de Puquios y el aluvión de rocas acabó para siempre con la vida del perforista Homero Aguirre Aguirre, de 40 años, y la de su ayudante Daniel Lazcano, de 24. En tanto, un tercer minero, Mauricio Silva Alcayaga, de 21 años, fue trasladado urgente primero al hospital de Copiapó y luego a uno de mayor complejidad porque el ojo izquierdo reventado, hecho papilla, requería un nosocomio de mayor complejidad.
Decir mina es una manera de decir. Un hoyo de unos 15 metros de hondo y con capacidad para una docena de seres humanos y era el primer día que trabajaban. Solamente los dueños y ellos sabían que existían. La truchada más total. Una verdadera burla que, calculan, se extiende a unos mil quinientos casos más. Solamente sucede que no han explotado ni se han venido abajo. La minería se ha convertido en la estrella de esta etapa del capitalismo y muestra todas sus lacras inhumanas y antihumanas. La proeza de Los 33 se festejó precisamente por eso. Aguirre y Lazcano no tuvieron ni una Kodak Fiesta para registrar la desgracia repetida hasta el hartazo. La información generada en el lugar se cuida muy mucho de estadificar la cantidad de víctimas fatales en lo que va del año. La última que aportaron al pasar fueron 53. Ahora serían 55. Que vaya otra vez la zambita como requiem.
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27.10.10
A POCO DE COMENZADO CENSO NACIONAL 2010
26.10.10
SE APAGAN LAS LUCES Y SE VAN LAS VISITAS
Como paliativo, claro, a la tarde ligaron una moto de diez mil dólares cada uno, pero ya están empezando a acusar los golpes de los excesos del alcohol y la incertidumbre de un futuro amenazante a pesar de todas las regalías después de tanto sufrimiento y heroísmo. Los 33 han puesto su nombre en la historia. En la de Chile y en la del mundo. De esto no se puede decir nada. Pero como 33, no como personas. No se trata de buscarle la quinta pata al gato, pero desde el 13 de octubre, cuando las 1.200 millones de personas por tevé quedamos con la boca abierta y los ojos llenos de lágrimas al verlos emerger de la tierra no hubo un sólo minuto de silencio para los 55, a secas, sin mayúsculas ni resaltados, compañeros que ya estaban abonando la tierra en lo que iba del 2010, producto de otros derrumbes a lo largo del mapa chileno. De ellos no se acordó nadie.
El multimillonario Sebastián Piñera es un personaje bastante singular y tiene una particular propensión a meter la pata. En la gira previa que se mandó con Europa su mujer le tuvo que llamar la atención y que la terminara con andar sacando del bolsillo el papelito original que escribió con marcador el minero José Ojeda y ya célebre frase ESTAMOS EN EL REFUGIO TODOS BIEN LOS 33. En la agitada noche del 12 de octubre, cuando ni siquiera se pudo hacer un beta test con la Fénix 2, otra vez Cecilia Morel, su mujer, lo tuvo que parar discretamente en seco porque se la pasaba preguntando entre los rescatistas si la cápsula era segura. Se quería mandar: "Un presidente tiene que estar siempre primero", trató de argumentar y no se tiene registro de la réplica conyugal, pero al él se le fueron los delirios de llegar como El Llanero Solitario a 622 metros de profundidad con hombres que habían roto contacto con la realidad hacía 69 días. En Alemania le tendrían que haber dicho que una de las materias grises del nazismo advirtió que la repetición del estímulo causa la cesación del estímulo y que la gente ya tenía los quimbos llenos con el asunto. Estaba banalizando una proeza para sacarse una foto más. Y viene, para el colmo, en una de las paradas, y le zampa al libro de visitantes: Deutschland über alles, nada menos que el comienzo de un célebre himno de la época de Hitler y tuvo que terminar pidiendo perdón. Repartió a rolete piedritas del fondo de la mina, haciéndose el sota y no diciendo que son rocas testigo del filón de oro que se llevó por delante la T-130 cuando horadaba sin parar para llegar lo antes posible hasta donde estaban Los 33. En el discurso del Patio de los Naranjos se acamaló en los lugares comunes porque la oratoria evidentemente no es su fuerte y para hacerse el mundano, el hombre común cuando figura 477º en la lista exclusiva de Forbes, viene y le sacude como testimonio de sus emociones que cada vez que iba al Campamento Esperanza y estaba con las mujeres de los mineros se le estrujaba el cuore. Ya venía embalado, trastabilló y dio de hocico en el piso: "Si mi mujer me quisiera la mitad sería el hombre más feliz", sacudió sin anestesia la potrillada que empalideció a la tropilla de cuicos que lo rodean. La muy paquetona y sobria Cecilia Morel estaba sentada un poco atrás y el micrófono registró claramente la réplica: "Métete 700 metros bajo tierra y ahí te vai a dar cuenta cómo te quiero." Lo tuvo que repetir por micrófono para toda la concurrencia y fueron para ella las risas y los aplausos. El furcio ya formaba parte del folclore junto al rescate.
Claro, tenía que reiterar los tics de político e insistir en que a partir del 5 de agosto, que fue cuando por fin se vino abajo la San José y dejó a Los 33 respirando tierra con 40º de temperatura y 90% de humedad durante 69 días porque Dios se acordó de ser alguna vez chileno, que va a cambiar drásticamente la condición de todos los trabajadores de su país. Exacto: hasta que se derrumbe otra mina, se venga abajo un andamio o una máquina le trague un brazo a otro obrero. Porque al ratito, como lo grafica para siempre el video que se linkeó más arriba o se detalla en otro lugar, en la payasada futbolera nada menos que en el Estadio Nacional que supo ser campo de concentración pinochetista los primeros días después del 11 de setiembre de 1973, con la triunfante copa en la mano le recordó al buenazo de Franklin Lobos, ex jugador profesional que supiera integrar la selección, que tal como estaba convenido, el seleccionado oficial, que jugó obviamente luciendo los colores nacionales, volvía a La Moneda y ellos, los trabajadores, "al fondo de la mina", como para que no hubiera dudas, "y los volvemos a rescatar", volvió a meter la pata hasta el cachete.
Hace poco todos los funcionarios tuvieron que presentar la declaración jurada de sus bienes. Sebastián Piñera no es ninguna excepción. Tal como venía, desde la tevé, el ex presidente Ricardo Lagos lo agarró de sobrepique y lo dejó tieso para otra fotografía: "No declaró todo el patrimonio que tiene. Se olvidó hasta de poner la cosa donde vive."
En una de esas está mal medicado. Los 33, juntos con los rescatistas, salieron de La Moneda y se fueron como criaturas a ponerse junto a la Fénix 2 que los había sacado literalmente del pozo. Algunos hasta lagrimearon porque desde la madrugada del 13 de octubre último que no la veían y por cierto que las circunstancias eran muy diferentes. La querían tocar, constatar que en ese supositorio de metal había ascendido desde el infierno. Realmente se sacaron lo que se denomina una foto de plaza, bien pajuerana, riéndose, en una de esas lo más valioso y sentido que se llevaron después de haber vuelto a la vida.
A esta hora todos ellos ya se desparramaron, todos los protagonistas han sido achatados por lo cotidiano y Chile tiene que volver no sólo a los restos de la demolición del terremoto y tsunami de febrero último sino a su dura realidad que por más que todo el neoliberalismo triunfante y la prensa mundial, la argentina incluída, los ponga como los benjamines del monetarismo, es el país sudamericano con mayor desigualdad social. No se puede negar los saltos que han dado en los últimos años, pero esto es sólo indicativo del estado en que estaban antes.
El balance final lo hizo el propio Piñera, a su estilo, pretendiendo inaugurar que la humanidad tiene desde ahora nueva forma de hacer las cosas, a la chilena, dice, que consiste en unirse todos en la adversidad y tirar parejo para salir adelante porque los japones y los alemanes, después de la segunda gran guerra no lo hicieron, y también algo que le es muy caro a su ideología: decir Chile y decir 11 de setiembre ha pasado para el recuerdo porque están Los 33. No tiene suerte. La senadora por Atacama, donde ocurrió la desgracia con suerte, es Isabel Allende, hija del Compañero Presidente, del que dijo que iba a pagar con su vida la lealtad de un pueblo y lo hizo.
En el magro y convencional mensaje oficial, el Berlusconi chileno, como lo chicanea la oposición, no reiteró la verdad inconstrastable que ya se palpa: Los 33 nunca van a volver a ser los mismos, incluso Chile ya no va a ser el mismo. Un pueblo curtido en la tragedia y la pobreza, con una envidiable y más que resaltante conciencia nacional, cultor de la belleza, tierra de poetas y vino, ha sacudido a la humanidad entera dos veces en poco menos de medio siglo. No es moco de pavo.
Ahora te toca a vos, Sebastián, cumplir con taponar los buracos que tiene la injusticia social de tu pueblo. La historia te está esperando. Por lo pronto, sin ser argentino y menos peronista, no pudiste cumplir con el protocolo y sacar a los mineros a los balcones engalanados de La Moneda. Los 5oo empleados de la Cadena de Farmacias Ahumada, la más grande en Chile, en huelga desde hace tiempo, con cacerolas y vuvuzelas, hacían mucha bulla, aprovechaban la volada para tener cámara y se habían hecho presentes porque ellos también son chilenos y trabajadores y tuvieron hasta que cortarle el audio al canal que forma parte de su patrimonio y tratar de disimular la irreverencia.
Para cerrar, aunque la mediatización, el reality show y algunas otras pavadas borró de la faz de la tierra, por ejemplo, hasta el nombre de Violeta Parra y su Gracias a la vida, le ponemos un broche de eternidad a lo que ya se empezó a diluir. La música, claro. Y qué mejor que Mercedes Sosa cantando música chilena.
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21.10.10
BASURA, MUCHA BASURA, PURA BASURA
Pero los argentinos malcogidos, todos, estamos con bronca. Nadie sabe por qué. Se ha dejado atrás el divorcio para rociar a la pareja con alcohol y prenderle fuego, cuando no meterle medio cargador de una 9mm. y listo. Los estudiantes han vuelto a la calle y en un hecho inédito, como los sioux de los viejos western tiraron abajo la entrada del Palacio Pizurno y tomaron el Ministerio de Educación. En Mar del Plata, también ayer, estaba entregando notebooks gratis para que los opas chicos entren al Primer Mundo y que el Primer Mundo se ponga en la cola, detrás nuestro, cuando un pibe va y se zarpa, subió al escenario y adelante de la cara le hizo pupa a una contra la mesa: "¿Para qué mierda quiero una computadora si no tengo para comer?", le gritó. Un poco sobreactuado, claro, pero indicador de que el mierdómetro popular está al mango.
Como el almanaque se acomoda a dedo, lo mismo que el fixture de la AFA y cualquier fin de semana es un fin de semana largo para que los dichosos con auto se vayan afuera y se hagan mierda a 160km/hora, en el último para el Día de la Raza un millón de gozosos argentinos se tomó el bote de la capital y se paron arriba de los cuatro ruedas, para salir y para volver, mucho más tiempo del que tuvieron para mojarse las patas. "Huelo a homicidio en el aire", supieron decir en su momento, en diferentes lugares y circunstancias, Jack Kerouac y Henry Miller. La Argentina huele a podrido y a muerte. De esto nos ocupamos un poco hace unos días, en esta misma bitácora. La bronca se dispara por los collares de perlas de varias vueltas, por los relojes ministeriales de 20 mil euros, por los cotorros en Puerto Madero para echarse unas siestas reparadoras. La tilinguería ha logrado lo que no consiguen campañas sistemáticas de agitación política. Estamos podridos, simplemente. Debe ser lo que sentenció ese otro célebre peronista que encuentra que somos un país condenado al éxito. Tanto éxito y exuberancia no es tolerable. Hay muchos pobres en el mundo y somos un pueblo con sensibilidad social. Somos un pueblo justicialista: paga más de impuestos al inmueble un dos ambientes en Once que un petit hotel en Palermo Chico. En ningún lugar del mundo rige semejante trotzkismo fundamentalista.
A la madrugada, también en Avellaneda, fue atacado a tiros el frente del domicilio de Alfonso Severo Enrique, 48 años, ex directivo de Ferrobaires que se desempeñaba como gerente de área en las oficinas del edificio de Plaza Constitución, y fue desalojado hace un año con otros compañeros por la misma patota que actuó ayer y que a su criterio lidera un tal Tressa con sus tres hijos, una banda autártica que trabaja para la Unión Ferroviaria en el negocio de los tercerizados. Muy lúcidamente analizó que este gran negocio de las cúpulas sindicales multimillonarias, peronistas desde siempre, es totalmente conocido y apañado desde el gobierno. Incluso recordó que cuando sucedió el conflicto con la expulsión gangsteril de él y sus compañeros pronosticaron que esto iba a tener un límite cuando apareciera un muerto: "Bueno, ahora apareció. Es este chico Ferreyra, pobrecito, y esperemos que la escalada llegue a su fin. Esta madrugada no sé cómo no hicieron un desastre con mis hijos y mis nietos, baleándome la casa." A esta altura es indispensable dejar consignado que un tercerizado cobra 2 mil pesos mensuales, 2,5 cuando mucho, los afilian de prepo de la UOCRA como si fueran albañiles y el básico de un ferroviario está en 7,2 mil pesos mensuales. En el colmo de la perversión, la cúpula yupie de lo que otrora fue el vandorismo, el miguelismo, el ruccismo y otros ismos de la eterna Burocracia Sindical se han organizado en cooperativas que bastardean a estas organizaciones porque son en realidad las patronales de los tercerizados y los que se quedan los subsidios que otorgan los cumpas que están en los respectivos organismos del gobierno actual, anterior y del que vendrá. Aparte lo sucedido en Barracas reedita el carcomido enfrentamiento de los '40 entre fachos y zurdos porque las contiendas internas de los perucas tienen una manera muy efectiva de resolverse por más que el cinismo oficial y sindical, ante las cámaras, sea revulsivo. Como todo el mundo sabe, un peronista no es ni yanqui ni marxista, pero que como indica la cruel obstinación de los hechos, al decir de los sajones, practican un macartismo letal que incluso es anterior al célebre senador yanqui Joseph McCarthy. Una tara que está de moda como son las redes sociales no podía tener ausentes a los sindicalistas peronistas y ayer se sacaron la careta los verdes, el mismo color de Moyano y de la Juventud Sindical en los '70, la puta, qué casualidad, les salió todo el veneno por los colmillos, amén de contradicciones a rolete en un vetusto como Juan Pedraza, que puso a su gente en River en primera línea aunque ahora Moyano lo esquive como culo a la jeringa. En un acto donde como muestra la foto Su Excelencia, en el colmo de la gronchada, posó para la posteridad con la gorrita y la T-Shirt de los que hicieron pupa la JP sobre todo a partir del 1º de mayo de 1974, que fue cuando El General dio la orden de darles duro a Los Imberbes. No contenta con semejante pavada después fue hasta la compu, publicó la foto y le puso en el colmo de la tilinguería twistera que cultiva con ahínco: "Quién me ha visto y quién me ve." Mire, doctora, para los que creen en otra vida, no 30 mil almas porque ni siquiera se sabe la cantidad de desaparecidos y exterminados en este país incierto, pero tenga por seguro que a más de uno le ha dado en el quinto forro.
El folklórico leit motiv oficialista de que este gobierno ha sido criticado por no reprimir las distintas protestas populares fue sacador a relucir ayer por Su Excelencia, hija de una dirigente sindical de los empleados públicos platenses. La réplica es feroz: el kirchnerismo no necesita reprimir porque para eso tiene a las patotas parasindicales, que son de vieja data, más ahora que se han dado el abrazo del oso con Hugo Moyano. Las policías federal y bonaerense les hacen zona blanca y todo queda en familia, efectivo y sobre todo impune.
Anoche, con toda su desfachatez, después de un acto en River Plate con varias decenas de miles de Masas Delivery, transportados en 4 mil micros, según le zampó el mismísimo Eduardo Duhalde, Hugo Moyano, el zar de las Obras Sociales que fue a visitar a la cárcel al cumpa en desgracia José Luis Zanola, se mandó otra demostración de fuerza y durante tres días inundó de basura a la ciudad de Buenos Aires y alrededores mandando a la huelga a los trabajadores del CEAMSE porque quieren nuevos predios para volcar los desechos. En su alocución en River sacó a relucir vieja literatura corporativista y junto a la compañía del matrimonio Kirchner reclamó para la cúpula cegegista cuotas en los tres poderes del Estado porque allí, según él, no se veían trabajadores. La réplica de Cristina chapoteó en lo lamentable: le recordó a su compañerito del alma que ella, desde los 18 años, tuvo que trabajar para estudiar y que fue empleada pública. Cris, por Dios, ¿desde cuándo en este país un empleado público trabaja en el buen sentido del término? De todas maneras la ofensiva peronista o lo que sea, en medio de este desmantelamiento y cóctel liberal-rosista, el puchero ideológico se completa con la exigencia moyanista de que los trabajadores no sólo tengan participación en las ganancias, un poquitito, como limosneó frente a un dirigente de la UIA en tevé, sino también tener acceso a la revisación de los libros contables, un pedido que fue exactamente como meterle un ají quitucho el occipucio. Los niveles de asquerosidad en que deambula sociedad argentina no sólo le valieron la cínica réplica que encantados, siempre y cuando los burgueses le puedan revisar los libros al sindicado de camioneros, la CGT y las Obras Sociales, sino que dejan para la última baza, esbozándolo sólo formalmente, que esa es una tarea de la AFIP donde la corrupción se hace un festival adornando inspectores y saben que en realidad Moyano quiere meter a los suyos para mojar también un poco el pancito en la patriótica tarea.
Cuando todavía faltan casi tres horas para el comienzo de la manifestación hacia la Casa Rosada de los partidos y movimientos de izquierda, más la CTA y otras organizaciones populares, están cortadas dos líneas ferroviarias, los subtes, y el Aeroparque prácticamente no funciona porque el personal de Aerolíneas Argentinas y de LAN Chile se ha adherido por la muerte del joven trabajador y estudiante de la FUBA asesinado ayer en Barracas. La efervescencia no parece corresponderse con la gravedad de un hecho lamentable y sí con un estado levantisco, de incordia, crispación, si nos atenemos al que acuño la expresión, el Guardia de Hierro en la Catedral, monseñor Berdoglio, mucho más peligroso que un estado prerrevolucionario ni nada que se le parezca. Las masas argentinas no están acéfalas. Mucho peor: están policéfalas y ningún grupo tiene ni siquiera un plan para llegar a la semana que viene, menos que menos un plan de país como no sea llenarse los bolsillos con los amigos, exactamente igual a lo que están haciendo los Kirchner, sólo que en ese caso cambiaríamos de apellido. Por este lado hay que buscar la condena al éxito que nos espera, según el Pitufo Duhalde, ahora acusado de sacudir el bote y donde si se cambia éxito por falta de futuro las cuentas cierran redondas.
No queremos ser originales, menos en momentos así, pero ¡ay, patria mía!, como dijo Beatriz Guido en último término.
13.10.10
¡Y ERAN 33 DE MANO NOMAS!
La sencillez de la épica y la hazaña amenazan con trivializar, banalizar todo. Allá abajo los otros 32 aguardaban su turno, asistidos por dos rescatistas especialmente entrenados, que habían bajado en los interines. Con el increíble y sincronizado operativo del Plan B empezaba a culminar la angustia del jueves 5 de agosto, más o menos a las 14:00, cuando iban a almorzar y el mundo, en la forma de 700 toneladas de roca, se les vino encima y los sepultó en lo más hondo de una mina centenaria de cobre y oro, reautorizada a seguir funcionando en más que precarias condiciones por esos hondos motivos humanitarios que tiene el capitalismo y que sólo él los comprende y disfruta. Pasaron 18 días hasta que pudieron localizarlos y que dieran señales que estaban vivos. Ya casi no quedaban esperanzas y la famosa palabra milagro era a la que acudían todos. Habían perforado el cerro y el veterano Mario Gómez, con un marcador rojo, escribió en un pedazo de papel un TXT de 33 caracteres que no tardaría en dar la vuelta al mundo:
Una obra maestra de la síntesis. Después de 33 días de perforación, de historias de todo tido tipo, la algarabía por vivir, la epopeya van a apocar, seguramente invisibilizar a los mapuches en huelga de hambre y la discusión por los royalties de la minería, la concentración de la minería nacional en cuatro o cinco familias, como la famosa Bolivia de los Patiño. También que en el paraíso neoliberal de Sudamérica, que como lo anunció Piñera antes del primer emergido, en un mensaje bilingüe, quiere convertir a Chile en el primer país latinoamericano, los 25 millones de dólares que ha sido hasta ahora el costo, la organización y el lomo lo ha puesto el Estado para solventar la hazaña salieron de las arcas de la legendaria CODELCO, estatal hasta la médula y un modelo siempre de funcionamiento. Privatistas y privados, cuando mucho, a la hora de las fotos. Los dueños se borraron. Contrataron buenos y caros abogados para decretar legalmente la quiebra y que pague Dios. El Estado, a través de diversas dependencias, corrió con la supervivencia y con el sostén, vigilancia, alimento y apoyo a una boca de la mina que ayer había devenido en una poblado de carpas y casas rodantes con unos 3 mil habitantes, la mitad de los cuales pertenecían a la fauna periodística de todo el mundo, empezando por la modesta representación de China Popular que mandó 200 para hacer una cobertura digamos normal.
Hoy es una jornada histórica. Para celebrar la condición humana y que en la crisis actual hay recreos posiblemente para la esperanza, pero recreos al fin y al cabo para disfrutar, abrazar al que está más cerca y descorchar. Cuesta creerlo porque todo parece tener el ritmo normal, cotidiano. No es para nada aventurado compararlo al día que Neil Amstrong pisó por primera vez la Luna, el 20 de julio de 1969, para nada en vivo y en directo como esta madrugada, sino trampeado por los dueños del mundo en plena Guerra Fría con la otra superpotencia. La nota la iba a poner Miguel Sepúlveda, el segundo, que cuando le abrieron ese verdadero ataúd con los colores patrios, se agachó, agarró una bolsa y en un verdadero show de ingenio, hiperkinesis y desgolletamiento total entró a sacar piedras y regalarles a todos, empezando por el presidente y la mujer, el ministro de Minería y otros más: cuando las cámaras hicieron el plano de detalle las vetas de oro relucían. Y es que en la perforación la famosa T-130 australiana descubrió una importantísima veta aurífera, posiblemente la mayor en el siglo que lleva el socavón alimentando la angurria humana.
Ahora no hubo trampas. Allá abajo, con una web cámara conectada con la superficie, en short por los 30º esperaban turno el resto, saltaban, se los veía gritar y reír a los restantes. Es muy posible que hoy, antes que den las 24:00, Los 33 -bígamos que se quedaron obligados a ejercer la monogamia porque terció hasta la Primera Dama en la defensa gremial de la fidelidad, solteros que van a hacer obligados a cumplir la promesa de casamiento hecha en la desesperación del encierro, otro que se va a encontrar con que la pololita está con premio y no le va a quedar otra, hipierkinético espiritista que subió con una mochila llena con piedras veteadas con el oro del filón que la T-130 descubrió en plena perforación, etc.- estén afuera y los aguarden contratos de tevé, editoriales, cruceros fastuosos, Pinera que ya les anunció que se los lleva como escolta en los próximos viajes presidenciales.
¡Salud, chilenos!
8.10.10
MUERTE, MUERTE, MUERTE, MUERTE, MUERTE
"[...] SOMOS TODOS"
Económicamente, a nivel supermercados, restoranes, ir a la cancha y al cine, rajarse por aquí cerca los fines de semana, mucho más si son largos, indican que transitamos otro veranito de San Juan luego de dos años donde hubo zozobra. Además, como claman desde el oficialismo, cuando van apenas diez meses del 2010, ya se han vendido más 0 kms. que en todo el 2009, cifra que ya marcó un récord. Sin embargo, testimonios al voleo e informes serios de periodistas extranjeros, se pegan la cabeza contra la pared por que no entienden de qué mierda nos quejamos los argentinos, pero se trata de pobre gente, inculta, zafia, que todavía no entiende que quejarse es otro Deporte Nacional, sobre todo cuando a uno le va más o menos bien, ni qué decir bien o muy bien y hay que camuflarse de la envidia, una ponzoña peor que la Inseguridad, sobre todo proveniente del extranjero porque nos quieren ocupar el país.
4.10.10
EL DIA QUE LA REALIDAD ENTRO A LA ROSADA
CREER O REVENTAR
22.9.10
¿ISABEL O GABRIELA?
10.9.10
NI LA OLIGARQUIA NI EL IMPERIALISMO: ¡LOS MOTOCHORROS!
"UN SUICIDIO EN DEFENSA PROPIA"
La intrepidez y el aventurerismo no tienen nada que ver con el coraje y la valentía. Un poco se parecen, pero nada más. Para un país entrenado para vivir en una crisis crónica el momento, sin embargo, es delicado. El gobierno no necesita oposición porque se tiene a sí mismo. Y la oposición no necesita gobierno porque están lo más entretenidos en el Don Pirulero, donde cada cual atiende su juego y busca las mejores localidades para las elecciones del 2011. El discurso de anoche de Néstor Kirchner, en medio de la maratón oral que con su mujer han lanzado a diario, vapuleando por enésima vez a Daniel Scioli e intimándolo a que dé nombres y apellidos a los que le tienen las manos atadas en su lucha contra la inseguridad bajo ningún punto de vista resultó una novedad cuando lo tuvo los primeros tres meses de gobierno, en el 2003, como vicepresidente, y ni siquiera lo atendía por teléfono. Pero ya es demasiado.
Cuando algunos índices de consumo, recaudación fiscal y comercio exterior indicaban cierto respiro para la gestión Kirchner II, una ola de salideras bancarias a cargo de motochorros, el baleo de una embarazada a punto de parir y la pérdida del bebé, una verdadera maratón a cargo de colectivos como superpetroleros matando gente todos los días y unos medios masivos de comunicación tan o más desaforados se han agregado a una ofensiva gubernamental contra el Poder Judicial que cuesta creer. Después de exhibir el logro de haber acabado con una Corte Suprema menemista de 9 miembros y mayoría automática, puestos en sus lugares algunos miembros por una prestigiosa currícula académica, el redoblar los esfuerzos en el tema de los derechos humanos aunque con treinta años de tardanza hizo sapo con el Síndrome Blumberg en el 2004, con movilizaciones masivas contra el garantismo que le hicieron temblar la pera a todas las autoridades y ahora, anoche, el mismo Kirchner, abogado, se tira de frente contra los jueces que dejan salir a los delincuentes por la otra puerta de la ingresaron. En el medio, claro, instauró un Consejo de la Magistratura aprovechando el tiempito que tuvo de viento de cola y poner en los lugares vacíos personajes a su gusto y semejanza, sin contar con que cualquiera que se quisiera retobar tenía una pistola apuntándole que iba a ir a parar al banquillo de los acusados.
Si hace seis años el clímax se alcanzó con el asesinato del joven hijo de un ingeniero que resultó no ser ingeniero y se convirtió en referente del proverbial miedo de las clases medias, base social de cuanta fachistonada ha tenido lugar en el país, ahora resultó ser el mortal resultado de una salidera bancaria en La Plata, donde una joven embarazada fue seguida desde el banco donde retiró 10 mil dólares, atracada en el momento de llegar a su casa, casi en pleno centro de la capital bonaerense, y baleada en la boca, cuando estaba en el suelo y había entregado el dinero. La cesárea con que se indujo el parto no pudo hacer nada para que el bebé muriera antes de una semana y el Caso Píparo se convirtiera hasta ayer, en que a la mujer de 34 años le dieron el alta, en primera plana de todas las noticias. Hay siete detenidos ya con prisión preventiva y muchos más interrogantes de fondo. Primero, semejante cantidad de gente para tan magro botín y segundo que un marcador al que le dicen Pimienta, cuando cayó porque lo buscaban hasta los bomberos, lo primero que hizo fue buchonear las conexiones policiales de su jefe. La mujer es empleada del Ministerio de Seguridad de la provincia, nada menos, y a pesar de lo conmocionante del hecho no dejó de llamar la atención el despliegue que incluyó al propio gobernador, el ex motonauta Daniel Scioli. El marido se negó a mantener todo contacto con la prensa hasta que su mujer no saliera de terapia intensiva y cuando eso sucedió dijo al aire, nada menos que en Canal 13, del Grupo Clarín, que la máxima autoridad provincial le había confesado que no podía hacer nada porque tenía las manos atadas. El baldazo de nafta en medio del incendio se hizo sentir. Ayer la víctima fue dada sorpresivamente de alta, no volvió a su departamento con el argumento del impacto de encontrarse otra vez en el lugar de los hechos y con tantas otras cosas hirientes, como la habitación que iba a ser para el chiquito, la ropa, etc., pero antes de las dos horas la tevé interrumpía las trasmisiones ordinarias para dar cuenta de un operativo policial en el lugar ante la denuncia anónima que el agua de la casa estaba envenenada... Todo esto casi simultáneo con las órdenes perentorias del ahora diputado Kirchner al gobernador para que dé los nombres de los que le tienen atadas las manos. La línea argumental del Poliladrón era mucho mejor, tenía mayor jerarquía y sobre todo, verosimilitud y credibilidad.
La modalidad salidera bancaria a cargo de jóvenes motochorros constituyó a lo largo de este último mes una verdadera ola multiplicada por las facilidades de las cámaras de seguridad y la entrega del video a los canales de tevé. Inmediatamente los paneles contaron con especialistas, las cifras acumuladas eran alarmantes y anteayer, luego de cabildeos y retaceos de la banca oficialista, la Cámara de Diputados aprobó un proyecto de ley para dotar a las entidades bancarias de algunas medidas preventivas, pero donde es más el ruido para la única realidad vigente, como es la mediática, que para los hechos. Del mismo modo, los paralelismos con lo sucedido en 1985, cuando el asesinato policial de Adrián Scaserra (15) en la cancha de Independiente desató una maratón jurídica para tapar el supuesto bache legal y por unanimidad dieron a luz la célebre Ley De la Rúa que iba a acabar en poco menos de 48 horas con el flagelo, que se sepa, ni en el TXT ni en la reglamentación, se contemplaba el charteo cuasi oficial de unos 300 al Mundial de Sudáfrica bajo el formato de una ONG palanqueada desde el oficialismo sin tapujos. De entonces a hoy salieron dos leyes especiales más y hay cuatro proyectos durmiendo el sueño de los justos en algún cajón del escritorio de sus autores.
Sin temor a las exageraciones ni generalizaciones se puede decir que jamás en la historia contemporánea, desde el Martín Fierro, los jueces han recibido semejante garroteada. Violadores con condena a los que les da prisión domiciliaria en la casa de al lado del menor sodomizado, homicida quíntuple, nacido en España, condenado a perpetua, que aparece a los 13 años volviendo de su país natal y comienza a amenazar al único sobreviviente de la masacre sin que nadie atine a contestar por cuál motivo lo dejaron salir y, más todavía, cómo pudo entrar con semejantes antecedentes, cárceles y comisarías rebalsando de detenidos, juicios orales que terminan en batallas campales por la disconformidad de una de las partes ante irregularidades manifiestas y otras perlas han irrumpido como si fueran un caño roto. El telón de fondo son las manifestaciones, sobre todo el conurbano, a la hora de los telenoticieros, reclamando justicia sobre todo por la muerte y/o violación de menores.
La policía ya ni siquiera es cuestionada. Ni siquiera nadie se toma el trabajo de recordar que el encubramiento de uno de los nuevos zares de la tevé, el actor, director y productor Adrián Suart se debe a la teleserie Poliladrón cuando tenía nada más que 26 años y corría el año 1994. Desde el título nomás no necesita un ensayo semántico y semiótico para explicarlo, menos que menos que uno de los sesudos críticos intelectualosos del género. El subtítulo, ahora, visto desde el tiempo, es revulsivo: Una historia de amor... Para colmo, en un tire y afloje en las administraciones nacionales y ex municipales, la negativa a dotar al nuevo estado autártico de una policía propia llevó a la creación de una nueva que debutó con una PyME de escuchas clandestinas y a exonerar nuevos miembros casi como los que tomaba, dado que los antecedentes que sacaban a relucir eran, en el sentido estricto del término, antecedentes.
Es bastante parecido a la dislexia un gobierno que entre los megaindicadores del crecimiento industrial se regocije con la industria automovilística cuando es la mayor causal de muerte, un verdadero autoexterminio argentino, y el trazado de calles, avenidas y autopistas ha colapsado de tal modo que los canales de noticias tienen servicios informativos especiales no se sabe para qué, ya que ningún modelo de auto viene con televisor y si está prohibido usar el celular, lo cual no quiere decir que se lo respete, menos un modelito con acceso a Internet y mirar de reojo, por allí, tevé en vivo. Con gobernantes que han hecho un estilo hablar de inundación cuando el agua ya está en la cumbrera del rancho y reaccionar a todo con discursos, ser curadores de palabras, enojarse con la prensa no sin asistirles algo de razón, pero los caracteriza a ellos ser ponedores de titulitos, no cumplir y cualquiera se atiene a la propaganda oficial hay una Nueva Argentina paradisíaca montada por un equipo de especialistas en comunicación a costos siderales. El pobre Guy Debord nunca pudo pensar hacer 40 años que la mejor representación de su anunciada Sociedad del Espectáculo iba a tener su escenario en un país del fondo a la derecha, si se mira el mapa desde París.
Los dibujos del INDEC se van a pagar caros no tanto por los costos económicos que van a acarrear, sino por las hijuelas socioculturales que va a dejar. La mentira oficial con desparpajo no es moco de pavo. Hacerse una costanera de 6 kms. a orillas del lago Argentino para revitalizantes caminatas que saquen el estrés del poder, a un costo de 50 millones de dólares, deja la pista para Jumbos que el Chango de Anillaco hizo para exportar aceitunas a la altura de una travesura adolescente. Sería hasta gracioso si en el medio no se hubiera producido semejante ensanchamiento de la brecha entre ricos y pobres, la concentración del capital y la riqueza en pocas manos, sobre todo algunas nuevas de los amigos del Poder, y la droga se haya enseñoreado como un artículo de consumo diario, accesible a cualquier borrego del conurbano y en las últimas elecciones no hayan aparecido cheques provenientes del Delito Organizado.
La coyuntura es grave. Pero precisamente porque no es coyuntura sino estructura. La característica esencial del fenómeno, como es lo invertebrado, las reacciones disparatadas e inesperadas, se completan con la ubicación de la doctora Cristina Fernández como una de las diez mejores líderes del mundo. El aserto corrió por cuenta del último número del semanario Time y no hay por qué dudar de su honradez intelectual. Lo que sería bueno es que pusiera a la luz del sol los criterios utilizados para evaluar y llegar a semejante conclusión.
La exasperación, los insultos, el descrédito reemplazando al razonamiento, la facción a la tendencia o al disenso, el pasionismo a la elaboración crítica, indudablemente, remite a la primera etapa de la gesta peronista. Ahora es sabido por todos que la historia no se repite. El mayor problema es que se parece.
El título de esta entrada esta tomado de una frase textual de un barra brava de Vélez Sarsfield definiendo a la violencia futbolera y recogida por Ernesto Vadini, fallecido hace poco más de un año, en Crónica de una hinchada (1982), la única obra de ficción que mira el fenómeno desde adentro y nunca lo premiaron con viajes y entradas gratis.